La Bioconstrucción es una disciplina dentro del mundo de la arquitectura y de la edificación que busca la integración del edificio en el entorno. Para ello es necesario conocer como funcionan las leyes de la naturaleza y conseguir el mínimo impacto. Se eligen técnicas constructivas adaptadas al entorno, paisaje y sociedad donde se implanta. Y estas envolventes generan espacios interiores que se convierten en la tercera piel del individuo, con lo que debe cumplir las mismas funciones que este tejido protector de nuestro organismo.
LOS 4 CONCEPTOS DE LA BIOCONSTRUCCIÓN
Materiales naturales
Los materiales deben ser lo más naturales posibles y menos adulterados, poco manufacturados y que pertenezcan al lugar. Los procesos de extración, manipulados, transporte y colocación deben ser respetuosos con el entorno y tener un Analisis de Ciclo de Vida (ACV) conocido. Pueden ser de carácter estructural como la madera o la tierra, formar parte de la envolvente, como los muros de adobe o tapia o de paja, con acabados como los revocos de barro o los enfoscados con cal o techos vegetales para cubiertas y con materiales aislantes tales como paja, lana de oveja, corcho, fibras de madera...
Sostenibilidad
La bioconstrucción es sostenible, porque guarda un equilibrio entre los aspectos ambientales y económicos (haciéndola viable), los económicos y sociales (haciendola justa) y los sociales y ambientales (haciendola soportable) para el sistema que la sostiene. Los sistemas construcitvos y los materiales provienen de fuentes renovables y proximas, minimizando la emisión de CO2 y el uso de energía fósil. Se tendrá en cuenta el entorno y el clima, los ocupantes y la sociedad en la que viven, la economía. Será más eficiente y confortable, consumirá menos y creará marcos de relación justos y equitativos.
Colaboración
La bioconstrucción también es colaborativa, fomentando proyectos participativos donde se combinan técnicas tradicionales con sistemas de construcción alternativos. Donde la toma de decisiones se realiza de manera transversal, comunicativa y participativa y no vertical e impuesta. Donde la prioridad no es la maximización de beneficios puramente moneratarios sino que se busca la integración y desarrollo justo de la sociedad y entorno en la que se implanta.
Bienestar
La bioconstrucción es salud y confort, entendidos como el equilibrio entre la calidad del aire interior, sin emisiones contaminantes de origen físico, químico o biológico, con superficies higroscópicas que al igual que nuestra piel permiten respirar sin dejar entrar el agua o el aire, confortables en el aspecto térmico, lumínico, acústico y espacial. Espacios bien proporcionados, con un estudio de la ergonomía y la utilidad a medida de las personas, para desarrollar toda su creatividad.
Si estás pensando en construirte una vivienda eficiente, saludable e integrada